Tú eres, yo soy
y todos somos;
nada se abstiene a ser,
salvo el ser más indoloro...
...en la búsqueda de lo indoloro.
Aquel sujeto, solo y desorientado, buscaba inspiración... y me encontró.
Tú eres, yo soy
y todos somos;
nada se abstiene a ser,
salvo el ser más indoloro...
...en la búsqueda de lo indoloro.
Esto es una disciplina,
a la que le doy las gracias,
es mi doctrina,
y ésta la primera página;
es la brisa,
que caerá en mi lápida,
en la que se pintarán sonrisas
y en la que se derramarán lágrimas.